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La capa arable desaparece - ¿será posible alimentar a la humanidad?
La capa superior del suelo, es decir, la capa arable, es crucial para la producción de alimentos. Sin embargo, después de 150 años de agricultura convencional, se está produciendo una degradación cada vez mayor de las tierras agrícolas. Se estima que ¡casi la mitad del suelo más productivo ha desaparecido! Si su consumo no se frena, en otros 150 años la humanidad agotará completamente los recursos de tierra cultivable (según los cálculos de David R. Montgomery, geomorfólogo de la Universidad de Washington). Además, el Instituto Demográfico Francés estima que en 30 años la población aumentará a 10 mil millones, por lo que la producción de alimentos también debería aumentar. ¿Podrá la agricultura hacer frente a este desafío?
¿Cómo alimentar a 10 mil millones de personas?
30 años no es un período tan largo como para ignorar los problemas relacionados con la destrucción de la capa arable. Cada año, alrededor de 10 millones de hectáreas de tierras de cultivo desaparecen debido a la erosión del suelo. Al mismo tiempo, la posibilidad de regeneración de las tierras agrícolas es insuficiente. ¿Por qué? ¡La reconstrucción de la capa productiva tarda de 10 a 40 veces más que su destrucción! En el capítulo "Cómo alimentar al mundo en tiempos de crisis climática y ecológica" del libro "Cinco minutos para las doce", la profesora Paulina Kramarz del Instituto de Ciencias Ambientales de la Universidad en Jagellónica Polonia explica por qué la agricultura industrial representa tal amenaza. Los cultivos característicos de este tipo de agricultura a gran escala realizados sin rotación resultan en el agotamiento del suelo. Además, los monocultivos son muy sensibles a los fenómenos meteorológicos extremos cada vez más frecuentes, por lo que enormes cantidades de alimentos cultivados simplemente se destruyen.
Esto crea un problema realmente serio en el contexto de alimentar a una población en constante crecimiento. Los expertos del World Resources Institute (WRI) creen que para 2050 la producción de alimentos debería aumentar en un 56%. ¿Qué proponen en relación con esto? Entre las cinco formas que mencionan, una es obvia: es necesario obtener una mayor cantidad de cosechas aumentando la eficiencia de los cultivos, entre otras cosas, mejorando la gestión del suelo. Sin embargo, ¿cómo lograr esto si ya no se puede "extraer" más de una tierra agotada?
Teniendo en cuenta los datos preocupantes sobre el grado de degradación de las tierras agrícolas, esto no parece una tarea fácil en absoluto. Sin embargo, resulta que difícil no significa imposible. Muchos agricultores en todo el mundo han reconstruido la capa arable del suelo en sus campos. Por ejemplo, los hermanos Keith y Brian Berns de Nebraska, quienes gracias al cultivo sin arado y la inclusión de cultivos de cobertura entre las cosechas, mejoraron significativamente la condición del suelo en su granja de 2000 hectáreas. El nivel promedio de materia orgánica aumentó del 1,8% al 2,8% entre 1999 y 2008, ¡y al 3,4% para 2015!
¿Por qué el arado de vertedera daña tanto al suelo?
Una de las mejores formas de mejorar la calidad de la capa arable es renunciar al arado. Por esta razón, desde hace años la misión de la marca Rolmako no es solo diseñar implementos modernos y eficientes para el cultivo sin arado, sino también difundir conocimientos sobre cómo hacerlo.
Sin embargo, ¿por qué el cultivo sin arado tiene una ventaja tan grande sobre el arado tradicional?
El arado consiste en cortar franjas de suelo, luego voltearlas y desmenuzarlas. Aunque trae beneficios (aumenta la aireación, mejora la distribución de nutrientes, limita la actividad de las plagas), al mismo tiempo expone el suelo a la erosión y favorece la formación de costra en el subsuelo. La erosión finalmente conduce a la pérdida de superficie cultivable debido al deterioro de la estructura del suelo y la formación de deslizamientos, barrancos, cuencas y surcos. Por otro lado, la costra aumenta la evaporación del agua, empeora la ventilación del suelo, favorece el desarrollo de hongos responsables de la pudrición de plántulas, y también dificulta o impide la germinación de las semillas.
¿Cómo mejorar la calidad de la capa arable en su campo con las máquinas Rolmako?
Rolmako apuesta por sistemas agrícolas que ayudan a reconstruir la valiosa capa arable. Las máquinas para cultivo sin arado y ultra superficial ocupan un lugar extremadamente importante en el portafolio de la marca, ya que son implementos para la agricultura regenerativa - aquella que construye la capa arable en lugar de degradarla. Sin embargo, vale la pena enfatizar que cambiar al cultivo sin labranza requiere planificación.
Antes de introducir el nuevo sistema, se debe:
-realizar un análisis completo del suelo para optimizar el pH y corregir las deficiencias,
-eliminar la suela de labor (compactación entre la capa arable y el subsuelo) - los subsoladores Rolmako son excelentes para esto, por ejemplo, el subsolador universal U602, los subsoladores U614 y U619, el subsolador multifuncional U638 o el subsolador/arado de cincel U624,
-nivelar la superficie del campo - para este propósito se pueden utilizar los rodillos Rolmako, por ejemplo, el rodillo para nivelar el campo y romper terrones o el rodillo acondicionador de suelo Cambridge.
Vale la pena señalar que las máquinas mencionadas aquí servirán no solo durante el período de transición (es decir, entre el uso del arado y su abandono completo), sino durante muchos años de cultivo sin arado. El arado de cincel Rolmako afloja y nivela excelentemente el suelo, preparando así el terreno para la siembra. Tiene una gran ventaja sobre el arado tradicional, ya que requiere menos tracción y consumo de combustible, y además trabaja con muy alta eficiencia. Por su parte, los rodillos de cultivo a menudo forman parte de los implementos para labranza simplificada - se pueden combinar, por ejemplo, con una grada de discos o un cultivador.
Otro importante implemento agrícola de Rolmako que apoya la regeneración del suelo es la rastra de paja SpringExpert. El acolchado/mulching es otra forma de cubrir uniformemente el campo con una capa de materia orgánica (por ejemplo, paja, residuos de cosecha o mantillo forestal). El acolchado protege la tierra contra la desecación, así como la erosión hídrica, permite el aumento de la biodiversidad y el desarrollo de microorganismos del suelo. Además, limita el crecimiento de malas hierbas (reduce el acceso de las semillas a la luz). Por otro lado, la materia orgánica dejada en la superficie del campo afecta favorablemente la fertilidad del suelo.
La grada/rastra de acolchado funciona perfectamente en el cultivo de rastrojos después de cereales y colza. El trabajo con la rastra SpringExpert asegura una excelente ruptura de la estructura de la paja, lo que hace que los residuos de cosecha se descompongan más rápidamente. Además, esta herramienta permite el control de malas hierbas y plagas. La rastra primero estimula el crecimiento de plantas voluntarias y malas hierbas, y en la siguiente etapa las destruye en la fase de cotiledón. Esto reduce la población de babosas, ya que les quita su fuente de alimento y destruye sus nidos.
El cultivador sin labranza juega un papel clave en la regeneración del suelo
El cultivador sin labranza (por ejemplo, Rolmako U436 multifuncional), al minimizar las intervenciones mecánicas, es muy beneficioso para la regeneración del suelo. Gracias a la ausencia de volteo tradicional de la tierra, preserva su estructura sin degradación, lo que favorece la retención de agua y la permeabilidad del suelo. Además, la reducción de la erosión del suelo, la disminución de la pérdida de materia orgánica y la preservación de microorganismos beneficiosos para el suelo son ventajas que se traducen en un aumento de su productividad. La eficacia de los cultivadores sin labranza en la mejora de la calidad del suelo los convierte en una herramienta importante para promover la agricultura sostenible y los ecoesquemas.
Cultivo sin arado y simplificado - sistemas agrícolas en armonía con la naturaleza
La profesora Paulina Kramarz añade en su libro que "la agroecología es una alternativa a la agricultura industrial. Es un sistema de cultivo de la tierra y cría de animales que se basa en el conocimiento de las conexiones entre los organismos que habitan los ecosistemas, incluidos los agrícolas".
El cultivo ultra superficial y simplificado, el uso de gradas/rastras de acolchado, cultivadores sin labranza, subsolado (aflojamiento sin volteo), mantenimiento de la cubierta vegetal durante el invierno y muchas otras prácticas que cumplen los requisitos de los llamados eco-esquemas también tienen un efecto positivo en el estado de los suelos y de ecosistemas enteros que están bajo el cuidado del agricultor. Así es exactamente como se debe ver un campo - como un organismo sensible que requiere cuidado y atención.
Teniendo en cuenta los datos preocupantes sobre el grado de degradación de las tierras agrícolas, esto no parece una tarea fácil en absoluto. Sin embargo, resulta que difícil no significa imposible. Muchos agricultores en todo el mundo han reconstruido la capa arable del suelo en sus campos. Por ejemplo, los hermanos Keith y Brian Berns de Nebraska, quienes gracias al cultivo sin arado y la inclusión de cultivos de cobertura entre las cosechas, mejoraron significativamente la condición del suelo en su granja de 2000 hectáreas. El nivel promedio de materia orgánica aumentó del 1,8% al 2,8% entre 1999 y 2008, ¡y al 3,4% para 2015!
¿Por qué el arado de vertedera daña tanto al suelo?
Una de las mejores formas de mejorar la calidad de la capa arable es renunciar al arado. Por esta razón, desde hace años la misión de la marca Rolmako no es solo diseñar implementos modernos y eficientes para el cultivo sin arado, sino también difundir conocimientos sobre cómo hacerlo.
Sin embargo, ¿por qué el cultivo sin arado tiene una ventaja tan grande sobre el arado tradicional?
El arado consiste en cortar franjas de suelo, luego voltearlas y desmenuzarlas. Aunque trae beneficios (aumenta la aireación, mejora la distribución de nutrientes, limita la actividad de las plagas), al mismo tiempo expone el suelo a la erosión y favorece la formación de costra en el subsuelo. La erosión finalmente conduce a la pérdida de superficie cultivable debido al deterioro de la estructura del suelo y la formación de deslizamientos, barrancos, cuencas y surcos. Por otro lado, la costra aumenta la evaporación del agua, empeora la ventilación del suelo, favorece el desarrollo de hongos responsables de la pudrición de plántulas, y también dificulta o impide la germinación de las semillas.
¿Cómo mejorar la calidad de la capa arable en su campo con las máquinas Rolmako?
Rolmako apuesta por sistemas agrícolas que ayudan a reconstruir la valiosa capa arable. Las máquinas para cultivo sin arado y ultra superficial ocupan un lugar extremadamente importante en el portafolio de la marca, ya que son implementos para la agricultura regenerativa - aquella que construye la capa arable en lugar de degradarla. Sin embargo, vale la pena enfatizar que cambiar al cultivo sin labranza requiere planificación.
Antes de introducir el nuevo sistema, se debe:
-realizar un análisis completo del suelo para optimizar el pH y corregir las deficiencias,
-eliminar la suela de labor (compactación entre la capa arable y el subsuelo) - los subsoladores Rolmako son excelentes para esto, por ejemplo, el subsolador universal U602, los subsoladores U614 y U619, el subsolador multifuncional U638 o el subsolador/arado de cincel U624,
-nivelar la superficie del campo - para este propósito se pueden utilizar los rodillos Rolmako, por ejemplo, el rodillo para nivelar el campo y romper terrones o el rodillo acondicionador de suelo Cambridge.
Vale la pena señalar que las máquinas mencionadas aquí servirán no solo durante el período de transición (es decir, entre el uso del arado y su abandono completo), sino durante muchos años de cultivo sin arado. El arado de cincel Rolmako afloja y nivela excelentemente el suelo, preparando así el terreno para la siembra. Tiene una gran ventaja sobre el arado tradicional, ya que requiere menos tracción y consumo de combustible, y además trabaja con muy alta eficiencia. Por su parte, los rodillos de cultivo a menudo forman parte de los implementos para labranza simplificada - se pueden combinar, por ejemplo, con una grada de discos o un cultivador.
Otro importante implemento agrícola de Rolmako que apoya la regeneración del suelo es la rastra de paja SpringExpert. El acolchado/mulching es otra forma de cubrir uniformemente el campo con una capa de materia orgánica (por ejemplo, paja, residuos de cosecha o mantillo forestal). El acolchado protege la tierra contra la desecación, así como la erosión hídrica, permite el aumento de la biodiversidad y el desarrollo de microorganismos del suelo. Además, limita el crecimiento de malas hierbas (reduce el acceso de las semillas a la luz). Por otro lado, la materia orgánica dejada en la superficie del campo afecta favorablemente la fertilidad del suelo.
La grada/rastra de acolchado funciona perfectamente en el cultivo de rastrojos después de cereales y colza. El trabajo con la rastra SpringExpert asegura una excelente ruptura de la estructura de la paja, lo que hace que los residuos de cosecha se descompongan más rápidamente. Además, esta herramienta permite el control de malas hierbas y plagas. La rastra primero estimula el crecimiento de plantas voluntarias y malas hierbas, y en la siguiente etapa las destruye en la fase de cotiledón. Esto reduce la población de babosas, ya que les quita su fuente de alimento y destruye sus nidos.
El cultivador sin labranza juega un papel clave en la regeneración del suelo
El cultivador sin labranza (por ejemplo, Rolmako U436 multifuncional), al minimizar las intervenciones mecánicas, es muy beneficioso para la regeneración del suelo. Gracias a la ausencia de volteo tradicional de la tierra, preserva su estructura sin degradación, lo que favorece la retención de agua y la permeabilidad del suelo. Además, la reducción de la erosión del suelo, la disminución de la pérdida de materia orgánica y la preservación de microorganismos beneficiosos para el suelo son ventajas que se traducen en un aumento de su productividad. La eficacia de los cultivadores sin labranza en la mejora de la calidad del suelo los convierte en una herramienta importante para promover la agricultura sostenible y los ecoesquemas.
Cultivo sin arado y simplificado - sistemas agrícolas en armonía con la naturaleza
La profesora Paulina Kramarz añade en su libro que "la agroecología es una alternativa a la agricultura industrial. Es un sistema de cultivo de la tierra y cría de animales que se basa en el conocimiento de las conexiones entre los organismos que habitan los ecosistemas, incluidos los agrícolas".
El cultivo ultra superficial y simplificado, el uso de gradas/rastras de acolchado, cultivadores sin labranza, subsolado (aflojamiento sin volteo), mantenimiento de la cubierta vegetal durante el invierno y muchas otras prácticas que cumplen los requisitos de los llamados eco-esquemas también tienen un efecto positivo en el estado de los suelos y de ecosistemas enteros que están bajo el cuidado del agricultor. Así es exactamente como se debe ver un campo - como un organismo sensible que requiere cuidado y atención.
Sin embargo, ¿por qué el cultivo sin arado tiene una ventaja tan grande sobre el arado tradicional?
El arado consiste en cortar franjas de suelo, luego voltearlas y desmenuzarlas. Aunque trae beneficios (aumenta la aireación, mejora la distribución de nutrientes, limita la actividad de las plagas), al mismo tiempo expone el suelo a la erosión y favorece la formación de costra en el subsuelo. La erosión finalmente conduce a la pérdida de superficie cultivable debido al deterioro de la estructura del suelo y la formación de deslizamientos, barrancos, cuencas y surcos. Por otro lado, la costra aumenta la evaporación del agua, empeora la ventilación del suelo, favorece el desarrollo de hongos responsables de la pudrición de plántulas, y también dificulta o impide la germinación de las semillas.
¿Cómo mejorar la calidad de la capa arable en su campo con las máquinas Rolmako?
Rolmako apuesta por sistemas agrícolas que ayudan a reconstruir la valiosa capa arable. Las máquinas para cultivo sin arado y ultra superficial ocupan un lugar extremadamente importante en el portafolio de la marca, ya que son implementos para la agricultura regenerativa - aquella que construye la capa arable en lugar de degradarla. Sin embargo, vale la pena enfatizar que cambiar al cultivo sin labranza requiere planificación.
Antes de introducir el nuevo sistema, se debe:
-realizar un análisis completo del suelo para optimizar el pH y corregir las deficiencias,
-eliminar la suela de labor (compactación entre la capa arable y el subsuelo) - los subsoladores Rolmako son excelentes para esto, por ejemplo, el subsolador universal U602, los subsoladores U614 y U619, el subsolador multifuncional U638 o el subsolador/arado de cincel U624,
-nivelar la superficie del campo - para este propósito se pueden utilizar los rodillos Rolmako, por ejemplo, el rodillo para nivelar el campo y romper terrones o el rodillo acondicionador de suelo Cambridge.
Vale la pena señalar que las máquinas mencionadas aquí servirán no solo durante el período de transición (es decir, entre el uso del arado y su abandono completo), sino durante muchos años de cultivo sin arado. El arado de cincel Rolmako afloja y nivela excelentemente el suelo, preparando así el terreno para la siembra. Tiene una gran ventaja sobre el arado tradicional, ya que requiere menos tracción y consumo de combustible, y además trabaja con muy alta eficiencia. Por su parte, los rodillos de cultivo a menudo forman parte de los implementos para labranza simplificada - se pueden combinar, por ejemplo, con una grada de discos o un cultivador.
Otro importante implemento agrícola de Rolmako que apoya la regeneración del suelo es la rastra de paja SpringExpert. El acolchado/mulching es otra forma de cubrir uniformemente el campo con una capa de materia orgánica (por ejemplo, paja, residuos de cosecha o mantillo forestal). El acolchado protege la tierra contra la desecación, así como la erosión hídrica, permite el aumento de la biodiversidad y el desarrollo de microorganismos del suelo. Además, limita el crecimiento de malas hierbas (reduce el acceso de las semillas a la luz). Por otro lado, la materia orgánica dejada en la superficie del campo afecta favorablemente la fertilidad del suelo.
La grada/rastra de acolchado funciona perfectamente en el cultivo de rastrojos después de cereales y colza. El trabajo con la rastra SpringExpert asegura una excelente ruptura de la estructura de la paja, lo que hace que los residuos de cosecha se descompongan más rápidamente. Además, esta herramienta permite el control de malas hierbas y plagas. La rastra primero estimula el crecimiento de plantas voluntarias y malas hierbas, y en la siguiente etapa las destruye en la fase de cotiledón. Esto reduce la población de babosas, ya que les quita su fuente de alimento y destruye sus nidos.
El cultivador sin labranza juega un papel clave en la regeneración del suelo
El cultivador sin labranza (por ejemplo, Rolmako U436 multifuncional), al minimizar las intervenciones mecánicas, es muy beneficioso para la regeneración del suelo. Gracias a la ausencia de volteo tradicional de la tierra, preserva su estructura sin degradación, lo que favorece la retención de agua y la permeabilidad del suelo. Además, la reducción de la erosión del suelo, la disminución de la pérdida de materia orgánica y la preservación de microorganismos beneficiosos para el suelo son ventajas que se traducen en un aumento de su productividad. La eficacia de los cultivadores sin labranza en la mejora de la calidad del suelo los convierte en una herramienta importante para promover la agricultura sostenible y los ecoesquemas.
Cultivo sin arado y simplificado - sistemas agrícolas en armonía con la naturaleza
La profesora Paulina Kramarz añade en su libro que "la agroecología es una alternativa a la agricultura industrial. Es un sistema de cultivo de la tierra y cría de animales que se basa en el conocimiento de las conexiones entre los organismos que habitan los ecosistemas, incluidos los agrícolas".
El cultivo ultra superficial y simplificado, el uso de gradas/rastras de acolchado, cultivadores sin labranza, subsolado (aflojamiento sin volteo), mantenimiento de la cubierta vegetal durante el invierno y muchas otras prácticas que cumplen los requisitos de los llamados eco-esquemas también tienen un efecto positivo en el estado de los suelos y de ecosistemas enteros que están bajo el cuidado del agricultor. Así es exactamente como se debe ver un campo - como un organismo sensible que requiere cuidado y atención.
Antes de introducir el nuevo sistema, se debe:
-realizar un análisis completo del suelo para optimizar el pH y corregir las deficiencias,
-eliminar la suela de labor (compactación entre la capa arable y el subsuelo) - los subsoladores Rolmako son excelentes para esto, por ejemplo, el subsolador universal U602, los subsoladores U614 y U619, el subsolador multifuncional U638 o el subsolador/arado de cincel U624,
-nivelar la superficie del campo - para este propósito se pueden utilizar los rodillos Rolmako, por ejemplo, el rodillo para nivelar el campo y romper terrones o el rodillo acondicionador de suelo Cambridge.
Vale la pena señalar que las máquinas mencionadas aquí servirán no solo durante el período de transición (es decir, entre el uso del arado y su abandono completo), sino durante muchos años de cultivo sin arado. El arado de cincel Rolmako afloja y nivela excelentemente el suelo, preparando así el terreno para la siembra. Tiene una gran ventaja sobre el arado tradicional, ya que requiere menos tracción y consumo de combustible, y además trabaja con muy alta eficiencia. Por su parte, los rodillos de cultivo a menudo forman parte de los implementos para labranza simplificada - se pueden combinar, por ejemplo, con una grada de discos o un cultivador.
Otro importante implemento agrícola de Rolmako que apoya la regeneración del suelo es la rastra de paja SpringExpert. El acolchado/mulching es otra forma de cubrir uniformemente el campo con una capa de materia orgánica (por ejemplo, paja, residuos de cosecha o mantillo forestal). El acolchado protege la tierra contra la desecación, así como la erosión hídrica, permite el aumento de la biodiversidad y el desarrollo de microorganismos del suelo. Además, limita el crecimiento de malas hierbas (reduce el acceso de las semillas a la luz). Por otro lado, la materia orgánica dejada en la superficie del campo afecta favorablemente la fertilidad del suelo.
La grada/rastra de acolchado funciona perfectamente en el cultivo de rastrojos después de cereales y colza. El trabajo con la rastra SpringExpert asegura una excelente ruptura de la estructura de la paja, lo que hace que los residuos de cosecha se descompongan más rápidamente. Además, esta herramienta permite el control de malas hierbas y plagas. La rastra primero estimula el crecimiento de plantas voluntarias y malas hierbas, y en la siguiente etapa las destruye en la fase de cotiledón. Esto reduce la población de babosas, ya que les quita su fuente de alimento y destruye sus nidos.
El cultivador sin labranza juega un papel clave en la regeneración del suelo
El cultivador sin labranza (por ejemplo, Rolmako U436 multifuncional), al minimizar las intervenciones mecánicas, es muy beneficioso para la regeneración del suelo. Gracias a la ausencia de volteo tradicional de la tierra, preserva su estructura sin degradación, lo que favorece la retención de agua y la permeabilidad del suelo. Además, la reducción de la erosión del suelo, la disminución de la pérdida de materia orgánica y la preservación de microorganismos beneficiosos para el suelo son ventajas que se traducen en un aumento de su productividad. La eficacia de los cultivadores sin labranza en la mejora de la calidad del suelo los convierte en una herramienta importante para promover la agricultura sostenible y los ecoesquemas.
Cultivo sin arado y simplificado - sistemas agrícolas en armonía con la naturaleza
La profesora Paulina Kramarz añade en su libro que "la agroecología es una alternativa a la agricultura industrial. Es un sistema de cultivo de la tierra y cría de animales que se basa en el conocimiento de las conexiones entre los organismos que habitan los ecosistemas, incluidos los agrícolas".
El cultivo ultra superficial y simplificado, el uso de gradas/rastras de acolchado, cultivadores sin labranza, subsolado (aflojamiento sin volteo), mantenimiento de la cubierta vegetal durante el invierno y muchas otras prácticas que cumplen los requisitos de los llamados eco-esquemas también tienen un efecto positivo en el estado de los suelos y de ecosistemas enteros que están bajo el cuidado del agricultor. Así es exactamente como se debe ver un campo - como un organismo sensible que requiere cuidado y atención.
Otro importante implemento agrícola de Rolmako que apoya la regeneración del suelo es la rastra de paja SpringExpert. El acolchado/mulching es otra forma de cubrir uniformemente el campo con una capa de materia orgánica (por ejemplo, paja, residuos de cosecha o mantillo forestal). El acolchado protege la tierra contra la desecación, así como la erosión hídrica, permite el aumento de la biodiversidad y el desarrollo de microorganismos del suelo. Además, limita el crecimiento de malas hierbas (reduce el acceso de las semillas a la luz). Por otro lado, la materia orgánica dejada en la superficie del campo afecta favorablemente la fertilidad del suelo.
La grada/rastra de acolchado funciona perfectamente en el cultivo de rastrojos después de cereales y colza. El trabajo con la rastra SpringExpert asegura una excelente ruptura de la estructura de la paja, lo que hace que los residuos de cosecha se descompongan más rápidamente. Además, esta herramienta permite el control de malas hierbas y plagas. La rastra primero estimula el crecimiento de plantas voluntarias y malas hierbas, y en la siguiente etapa las destruye en la fase de cotiledón. Esto reduce la población de babosas, ya que les quita su fuente de alimento y destruye sus nidos.
El cultivador sin labranza juega un papel clave en la regeneración del suelo
El cultivador sin labranza (por ejemplo, Rolmako U436 multifuncional), al minimizar las intervenciones mecánicas, es muy beneficioso para la regeneración del suelo. Gracias a la ausencia de volteo tradicional de la tierra, preserva su estructura sin degradación, lo que favorece la retención de agua y la permeabilidad del suelo. Además, la reducción de la erosión del suelo, la disminución de la pérdida de materia orgánica y la preservación de microorganismos beneficiosos para el suelo son ventajas que se traducen en un aumento de su productividad. La eficacia de los cultivadores sin labranza en la mejora de la calidad del suelo los convierte en una herramienta importante para promover la agricultura sostenible y los ecoesquemas.
Cultivo sin arado y simplificado - sistemas agrícolas en armonía con la naturaleza
La profesora Paulina Kramarz añade en su libro que "la agroecología es una alternativa a la agricultura industrial. Es un sistema de cultivo de la tierra y cría de animales que se basa en el conocimiento de las conexiones entre los organismos que habitan los ecosistemas, incluidos los agrícolas".
El cultivo ultra superficial y simplificado, el uso de gradas/rastras de acolchado, cultivadores sin labranza, subsolado (aflojamiento sin volteo), mantenimiento de la cubierta vegetal durante el invierno y muchas otras prácticas que cumplen los requisitos de los llamados eco-esquemas también tienen un efecto positivo en el estado de los suelos y de ecosistemas enteros que están bajo el cuidado del agricultor. Así es exactamente como se debe ver un campo - como un organismo sensible que requiere cuidado y atención.
El cultivador sin labranza juega un papel clave en la regeneración del suelo
El cultivador sin labranza (por ejemplo, Rolmako U436 multifuncional), al minimizar las intervenciones mecánicas, es muy beneficioso para la regeneración del suelo. Gracias a la ausencia de volteo tradicional de la tierra, preserva su estructura sin degradación, lo que favorece la retención de agua y la permeabilidad del suelo. Además, la reducción de la erosión del suelo, la disminución de la pérdida de materia orgánica y la preservación de microorganismos beneficiosos para el suelo son ventajas que se traducen en un aumento de su productividad. La eficacia de los cultivadores sin labranza en la mejora de la calidad del suelo los convierte en una herramienta importante para promover la agricultura sostenible y los ecoesquemas.
Cultivo sin arado y simplificado - sistemas agrícolas en armonía con la naturaleza
La profesora Paulina Kramarz añade en su libro que "la agroecología es una alternativa a la agricultura industrial. Es un sistema de cultivo de la tierra y cría de animales que se basa en el conocimiento de las conexiones entre los organismos que habitan los ecosistemas, incluidos los agrícolas".
El cultivo ultra superficial y simplificado, el uso de gradas/rastras de acolchado, cultivadores sin labranza, subsolado (aflojamiento sin volteo), mantenimiento de la cubierta vegetal durante el invierno y muchas otras prácticas que cumplen los requisitos de los llamados eco-esquemas también tienen un efecto positivo en el estado de los suelos y de ecosistemas enteros que están bajo el cuidado del agricultor. Así es exactamente como se debe ver un campo - como un organismo sensible que requiere cuidado y atención.
El cultivo ultra superficial y simplificado, el uso de gradas/rastras de acolchado, cultivadores sin labranza, subsolado (aflojamiento sin volteo), mantenimiento de la cubierta vegetal durante el invierno y muchas otras prácticas que cumplen los requisitos de los llamados eco-esquemas también tienen un efecto positivo en el estado de los suelos y de ecosistemas enteros que están bajo el cuidado del agricultor. Así es exactamente como se debe ver un campo - como un organismo sensible que requiere cuidado y atención.
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